Durante más de cuatro décadas, fue el fantasma que aterrorizó California. Violó a más de 50 mujeres, asesinó al menos a 13 personas, y desapareció sin dejar rastro. La policía lo buscó obsesivamente. El FBI ofreció recompensas millonarias. Pero parecía intocable.

Hasta que su primo tercero escupió en un tubo.

El 24 de abril de 2018, cuando los agentes tocaron la puerta de una casa modesta en las afueras de Sacramento, nadie esperaba que detrás estuviera uno de los criminales más buscados de la historia estadounidense: Joseph James DeAngelo, de 72 años, ex policía, esposo, padre y abuelo.

El hombre que aterrorizó California durante una década finalmente tenía rostro. Y la forma en que lo encontraron cambiaría para siempre la investigación criminal.


El reinado del terror: Tres asesinos en uno

Lo que hace único al caso del Golden State Killer es que durante años, la policía no sabía que estaba persiguiendo a la misma persona.

1974-1978: El “East Area Rapist” (Violador del Área Este)

En junio de 1976, un intruso enmascarado entró a una casa en el condado de Sacramento. Su metodología era escalofriante:

  • Entraba de madrugada cuando las víctimas dormían
  • Usaba linterna para cegarlas
  • Ataba al hombre con cordones
  • Ponía platos sobre su espalda: “Si escucho que se caen, mato a tu esposa”
  • Violaba repetidamente a la mujer en otra habitación
  • A veces se quedaba horas, comía de su refrigerador, robaba pequeños objetos

Más de 50 mujeres fueron violadas con esta metodología exacta. Siempre en el área este de California. Siempre de madrugada. Siempre con la misma precisión militar.

1979-1981: El “Original Night Stalker”

Entonces, los ataques cambiaron. El violador se había convertido en asesino.

Entre 1979 y 1981, parejas fueron encontradas muertas en sus hogares en el sur de California:

  • Atadas con los mismos nudos
  • Asesinadas con extrema brutalidad
  • La escena indicaba saña y control

Pero la policía del sur de California no estaba conectada con la del norte. No sabían que era el mismo hombre.

1986: El último ataque conocido

El 2 de mayo de 1986, Janelle Cruz, de 18 años, fue encontrada asesinada en Irvine.

Y luego… nada. Silencio absoluto. El asesino desapareció como si nunca hubiera existido.

La conexión que nadie vio por décadas

No fue hasta 2001 que el investigador Paul Holes hizo la conexión explosiva:

El East Area Rapist y el Original Night Stalker eran la misma persona.

El DNA de las escenas del crimen coincidía perfectamente. California no había tenido dos monstruos separados. Había tenido uno solo que evolucionó de violador a asesino.

El FBI creó un nuevo nombre para el sospechoso: Golden State Killer (Asesino del Estado Dorado).

Pero incluso con esta revelación, el caso seguía congelado. Tenían su DNA, pero no había coincidencias en ninguna base de datos criminal.

¿Cómo encuentras a alguien que nunca fue arrestado?


El arma secreta: Tu árbol genealógico

En 2017, el investigador Paul Holes estaba a punto de retirarse. Había dedicado décadas al caso y nunca había estado más cerca de resolverlo. Entonces descubrió algo revolucionario:

GEDmatch – una base de datos genealógica pública donde la gente subía su DNA para encontrar parientes.

La idea era simple pero brillante:

  1. Subir el DNA del Golden State Killer a GEDmatch
  2. Ver si coincidía con algún familiar lejano
  3. Construir un árbol genealógico hacia atrás
  4. Identificar al sospechoso

Era una técnica nunca usada antes en investigación criminal.

En abril de 2018, obtuvieron resultados: el DNA del asesino coincidía con varios primos terceros y cuartos. Investigadores forenses comenzaron a construir árboles genealógicos masivos, siguiendo cada rama familiar.

Después de semanas de trabajo genealógico, todos los caminos apuntaban a un solo nombre:

Joseph James DeAngelo.

El momento de la captura: El monstruo era un abuelo

El 24 de abril de 2018, agentes del FBI y la policía de Sacramento rodearon una casa en Citrus Heights.

Dentro vivía Joseph DeAngelo, de 72 años:

  • Ex oficial de policía (trabajó en dos departamentos en los 70s)
  • Veterano de la Marina de Vietnam
  • Casado durante décadas (divorciado en los 90s)
  • Padre de tres hijas
  • Abuelo
  • Vecino tranquilo que arreglaba su propio auto

Cuando abrieron la puerta, encontraron a un anciano desconcertado. “¿Qué está pasando?” fue lo único que dijo.

Le informaron que estaba arrestado por el asesinato de Brian y Katie Maggiore en 1978.

Su respuesta: “Tengo un rugido dentro de mí.”

Fue la única pista de lo que había vivido oculto durante 40 años.


El perfil del monstruo: ¿Quién era realmente?

La investigación posterior reveló detalles escalofriantes sobre DeAngelo:

El policía criminal

Joseph DeAngelo fue oficial de policía en Exeter (1973-1976) y Auburn (1976-1979).

Aquí está lo perturbador:

  • Sus primeros crímenes como East Area Rapist comenzaron en 1976
  • Estaba activo como policía mientras cometía los crímenes
  • Tenía acceso a información policial, técnicas de investigación y entrenamiento

Fue despedido en 1979 por robar un martillo y gasolina de una tienda. Su carrera policial terminó… pero sus asesinatos apenas comenzaban.

La obsesión y el método

Sobrevivientes y evidencia revelaron su patrón:

  • Vigilaba a las víctimas durante semanas antes de atacar
  • Conocía sus rutinas, horarios, distribución de la casa
  • Llamaba por teléfono días antes: respiración pesada, amenazas
  • Entraba por ventanas, puertas traseras, aprovechaba puntos ciegos
  • Desataba teléfonos para impedir llamadas de auxilio

Tenía control total. No improvisaba. Cada ataque era milimétrico.

Las llamadas fantasma

Años después de los crímenes, víctimas recibían llamadas:

  • Respiración pesada
  • Ninguna palabra
  • Solo… presencia

¿DeAngelo las seguía acechando incluso después? ¿Era su forma de revivir el poder?

El juicio: Admitió todo para evitar la pena de muerte

El caso contra DeAngelo era sólido:

  • DNA en 26 escenas del crimen
  • Evidencia física preservada durante décadas
  • Testimonios de sobrevivientes

En junio de 2020, Joseph DeAngelo se declaró culpable de 13 asesinatos y 13 secuestros relacionados con violaciones.

A cambio, evitó la pena de muerte y recibió:

  • Cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional
  • 11 cadenas perpetuas consecutivas adicionales

El impacto en las víctimas

Durante tres días, más de 50 víctimas y familiares dieron testimonios devastadores en el juicio:

Una sobreviviente dijo: “Robaste mi juventud, mi seguridad, mi capacidad de confiar. Pero no robaste mi vida. Yo sobreviví. Tú perdiste.”

Otra víctima: “Pasé 44 años mirando sobre mi hombro. Ahora puedes pasar el resto de tu vida mirando paredes de concreto.”

DeAngelo permaneció en silencio la mayor parte del juicio. Pero en su última declaración, con voz temblorosa, dijo:

“He escuchado sus declaraciones. Cada una. Y lo siento a todos.”

Era la primera vez que hablaba sobre sus crímenes.


El legado: Cómo cambió la investigación criminal

El caso del Golden State Killer revolucionó para siempre la forma en que se resuelven crímenes:

1. DNA genealógico se volvió estándar

Después de DeAngelo, docenas de casos fríos se resolvieron usando la misma técnica:

  • El asesino de April Tinsley (30 años sin resolver)
  • El violador de NannyGate (25 años)
  • Decenas más cada año

2. Ningún caso es demasiado viejo

Si hay DNA preservado, hay esperanza. Casos de los 60s, 70s, 80s ahora tienen nuevas oportunidades.

3. Debate sobre privacidad

El uso de bases genealógicas públicas generó debates:

  • ¿Es ético usar DNA de familiares inocentes?
  • ¿Dónde está la línea entre justicia y privacidad?

La mayoría concuerda: cuando se trata de asesinos seriales, la justicia debe prevalecer.

Las preguntas que quedan

A pesar de la condena, hay misterios sin resolver:

¿Por qué paró en 1986?

DeAngelo no cometió más crímenes conocidos después de 1986. ¿Por qué?

  • ¿Miedo a ser capturado?
  • ¿Cambios personales?
  • ¿O simplemente no lo descubrieron?

¿Hubo más víctimas?

¿13 asesinatos y 50 violaciones son realmente todos? Muchos investigadores creen que hay casos sin resolver que podrían ser suyos.

¿Cómo vivió con esto durante 40 años?

Sus vecinos, familia, compañeros de trabajo nunca sospecharon nada. ¿Cómo un monstruo así funciona como persona “normal” durante décadas?


Reflexión final: La cicatriz que la tecnología cerró

El Golden State Killer aterrorizó California durante más de una década. Destruyó vidas, familias, la sensación de seguridad de comunidades enteras.

Durante 40 años, pareció que se había salido con la suya.

Pero la ciencia no olvida. El DNA no miente. Y la justicia, aunque lenta, eventualmente alcanza a los que creen que son intocables.

Joseph DeAngelo pasará el resto de su vida en prisión. Morirá allí. Sin libertad, sin familia, sin el poder que una vez tuvo sobre sus víctimas.

Y para las sobrevivientes, aunque el dolor nunca desaparecerá completamente, al menos tienen algo que no tuvieron por décadas:

Respuestas. Cierre. Justicia.

La cicatriz criminal finalmente sanó.


💬 ¿Crees que hay más víctimas sin descubrir? ¿Qué opinas del uso de DNA genealógico? Déjanos tu opinión en los comentarios.

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